El juego de las culturas

Este verano habíamos decidido ir de vacaciones con mis sobrinos de 9 y 10 años. Entonces pensé en preparar un juego que les pudiera interesar tanto a ellos como a una niña de 3 años. Y así organicé el juego de las culturas. Al principio del primer día me desanimé un poco porque no parecían mostrar mucho interés pero conforme fue pasando el día me di cuenta de que les estaba gustando y se lo estaban pasando bien. 

Cada día por la mañana cuando se levantaban tenían una mesita preparada con: un instrumento de música, algo de comida, un animal, algún objeto, música, un juego y un cuento de una cultura determinada. Elegí cinco: Hindú, China, Marroquí, Nigeriana y Guatemalteca. Y así, han comido cacahuetes de Nigeria, han tocado la darbuka de Marruecos, han contado sus problemas a los muñecos quitapenas de Guatemala al irse a dormir, han comido con palillos chinos (carne de la barbacoa, ¡ja, ja!), se han colocado el Bindi hindú en la frente... Y hemos leído (unas veces con más ganas y otras con menos) los cuentos de esas culturas de un precioso libro de Intermón Oxfam: El bosque de cuentos.