Cuando mi hija pega...

Cuando B. era más pequeña y veía a otros niños pegar tenía el sentimiento de que eso no nos iba a pasar a nosotros, porque ella no iba a pegar si nosotros no lo hacíamos. Pero, me equivoqué, y ese momento ha llegado y nos está costando situarnos. Pienso que no nos podemos quedar de brazos cruzados como si no hubiera pasado nada. Primero, tenemos que intervenir porque se trata de un niño más pequeño que ella y segundo algo había que hacer para que ella entendiera que no estaba bien. A la segunda vez que lo hizo, le dijimos que si se volvía a repetir nos tendríamos que marchar de donde estuviésemos. Y el viernes sucedió. Estábamos todos a gusto con los amigos y nos tuvimos que marchar. Alguno puede pensar que suena a castigo, pero al fin y al cabo ella tuvo que dejar de estar con sus amigos, pero nosotros (los papis) también. Esto de la crianza me parece muy complicado, porque hay veces no tienes tiempo de pensar cómo reaccionar y te llega "aquí te pillo y a aquí te mato" y la reacción puede ser equivocada. Otras veces le pilla a uno con un mal día, con cansancio o desesperanza. Y otras veces, a pesar de que te parece que has hecho lo adecuado, por dentro te siguen las dudas y no te lo quitas la cabeza. Bueno, lo mejor es que podemos compartirlo con los amigos del día a día y con los blogueros. Gracias a todos.