Una de las cosas que más ha pedido libremente y ha realizado B. esta semana ha sido dibujar y lo ha hecho con diferentes pinturas y soportes (pinceles, ceras, témperas, acuarelas, cuaderno, una hoja de cartón). Lo suele combinar además con que después quiere practicar el recorte con tijeras y con que papá o mamá hagan algo más, que ella solicita, en el dibujo.
Otra de las cosas que más ha pedido ha sido los cuentos. En la biblioteca cogimos varios de Gianni Rodari, y el de Confundiendo historias ha sido uno de los que más hemos leído y con el que más nos hemos reído ¡Y no es fácil que un cuento haga reír! Además las ilustraciones son magníficas. También hemos leído, del mismo autor Inventando números y Jaime de cristal. Este último me parece más recomendable para jóvenes y adultos. Con respecto a la lectoescritura es muy habitual que cualquier papelito, folleto o revista que cae en manos de B. hace como que lo estuviera leyendo y empieza a mezclar historias de los cuentos que leemos. Es divertido escucharla.
Hemos pasado mucho tiempo al aire libre y B. ha aprovechado no sólo para el juego libre (llenando de arena y vaciando lo que fuera) sino también para la recolección de piedras, palos, piñas, e incluso trozos de cristal de una botella rota ( -"Anda hija tira eso que puede cortar" -"Mamá es que me parece muy curioso"). Y a todos inevitablemente nos dio la risa con su magnífica respuesta.
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